La carretera hacia Yosemite parte de la ciudad de Fresno. De
nuevo remontamos la cordillera hasta situarnos por encima de los 1.600 m, donde
pernoctamos a las puertas del parque.
Unos kilómetros después del control de acceso ya vemos el
primer oso.
Nuestra primera incursión al parque la hacemos por la ruta
hacia Glacier Point. La carretera nos eleva hasta los 2300 metros siguiendo las
cimas del lado sur del valle del Yosemite, desde donde tenemos las mejores
vistas del valle.
Un recorrido a pie hasta la cima del Centinela nos lleva por
los mejores miradores de este parque. A lo lejos vemos las cascadas Yosemite.
Y cerca de ellas la imponente pared granítica del Capitán, que
ronda los 1000 metros de altura.
El sendero es muy aéreo entre cornisas y paredes verticales, asomándonos
al grandioso espectáculo del valle glaciar del Yosemite.
El paisaje que rodea al Centinela es tan extraordinario que en
el tiempo que permanecimos allí asistimos a la celebración de dos bodas.
Continuando la carretera hasta su punto final llegamos a
Glacier Point. Al frente se alza el Half Dome, que junto con el Capitán son las
montañas más emblemáticas de este parque.
También se ven las cascadas Vernal y Nevada.
Durante los meses de julio y agosto es tal la avalancha de
visitantes, que para conseguir una plaza de aparcamiento tienes que madrugar. Hoy
queremos hacer el sendero a las cascadas Vernal.
Es uno de los senderos más frecuentados y recorre el rio hasta
el pie de la cascada.
Los animales dentro del parque se sienten protegidos y son fáciles
de fotografiar.
El valle del Yosemite, en el centro del parque, constituye uno
de los más bellos ejemplos de valle glaciar, por donde hoy discurre el rio
Merced.
Fue la primera zona protegida del mundo en 1864, por un
decreto firmado en persona por Abraham Lincoln.
Una agradable excursión en bicicleta por el valle nos lleva a
descubrir parte de su privilegiada fauna y flora. A este oso lo pillamos
comiendo manzanas subido en el árbol.
Las cascadas Yosemite son las más altas del parque, la
superior es visible desde todo el valle. A la inferior se llega por un corto
sendero.
En el centro de visitantes hay un museo dedicado a los indios
miwok y painte.
Sin duda, para los que hemos practicado la escalada, la pared
del Capitán es un símbolo a nivel mundial.
Con la ayuda de los prismáticos localizamos en la mitad de la
pared dos escaladores arrastrando su equipo a lo largo de la fisura de una de
sus vías.
La carretera desciende por un largo puerto de montaña y
bajamos a las sofocantes llanuras con un paisaje poco atractivo, donde se
suceden las plantaciones de frutales y hortalizas de California.
A unos 350 km. de Sierra Nevada entramos en la zona lacustre
de la costa del Pacifico formada por rías, zonas inundables y pequeñas bahías.
Entramos en la Reserva
Marina Punta Reyes y nos llevamos una sorpresa, la temperatura había descendido
hasta los 16º C., la niebla cubría todo el horizonte y el agua del mar es
extremadamente fría.
La corriente fría de Alaska choca con el calor de la tierra
creando una espesa niebla costera y dulcificando el verano en la costa
californiana.
La aplicación Ioverlander recomienda un parking cercano al
Palacio Bellas Artes, desde donde empezamos nuestra visita.
Es el edificio más notable que ha sobrevivido a la exposición
internacional de 1915. Su arquitectura es sensacional, mezclando elementos
clásicos y neo romanos.
El español Juan Manuel de Ayala desembarco en estos parajes en el año 1775. A mediados del siglo XIX se descubrió oro y una oleada de buscadores transformo esta ciudad en tamaño e importancia.
Aquí vive una colonia de leones marinos, que se pasan el día
sesteando, ajenos al bullicio que los rodea.
Al día siguiente cogimos las bicicletas para hacer una
excursión hasta Sausalito, aprovechando el carril bici que recorre el Golden
Gate.
Este puente es el símbolo de San Francisco. Tiene una longitud
de 2.737 metros y en su tiempo fue el puente colgante más largo del mundo.
Al otro lado y frente a San Francisco se encuentra el pequeño
y coqueto pueblo de Sausalito. Las nieblas casi perpetuas procedentes del
océano saltan por encima de las colinas.
Pasamos junto a la isla de Alcatraz, que no pudimos visitar porque
estaba todo reservado hasta septiembre.
Filopensamientos y otras cosas……………
La escalada de la pared de granito del Capitán es de una
enorme dificultad. Aquí se crearon las bases del nacimiento y desarrollo de la
llamada escalada extrema.
La primera ascensión se realizo en 1978.
A esta mítica y vertiginosa pared llegaron los hermanos Garcia
Gallego, conocidos como Los Murcianos, y realizaron en 1981 una de sus vías más
difíciles, La Salathe, de 1.162 metros.
Los americanos se jactaban de que solo ellos y sus habilidad
en la escalada hacia posible abrir nuevas vías en esta pared. Pero los
murcianos que habían abierto caminos verticales en las paredes más difíciles
del mundo, llegaron aquí e hicieron historia en el invierno de 1988. Abrieron
la via que llamaron Murcia Costa Cálida. La dureza del clima y la dificultad de
la roca los obligó a realizar una de las escaladas más largas del alpinismo,
estuvieron colgados de la pared 57 días consecutivos.
Años después abrieron tres vías más, entre ellas, la
directísima Mediterráneo, con 25 buriles de anclaje debido a la escasez de
grietas donde poner las clavijas. Todavía hoy está considerada de una
dificultad extrema.
Interesantísimo el comentario sobre "Los Murcianos". Había oído hablar de ellos, pero no sabía lo de sus hazañas en el "Capitán"
ResponderEliminarPor cierto, ¿Quién de vosotros ha hecho escalada?